This annoying love - Capítulo 1

Las responsabilidades de la nueva jefa suprema
El desierto no era precisamente conocido por tener fuertes tormentas, después de todo es parte de que sea uno ¿No es así? Pero esta era una de esas raras ocasiones en las que el agua nos lograba sorprender a todos los habitantes de la periferia. Si tan solo hubiese llegado en una mejor situación… Sin dudas lo habría apreciado más.
- ¡Lucy! *jadeo* ¡Deja de correr, es peligroso! Ugh- Mi- Mi pierna… ¿Justo ahora? – mi cuerpo era fuerte, pero ese último accidente de verdad había hecho un buen daño. Hasta yo sabía cuándo me había excedido y ahora mismo… Bueno, ya me había pasado hace un buen rato -. ¡Hay muchos seres etéreos en la zona! ¡Solo vamos a casa!
- ¡No! *jadeo* E- ¡Estoy harta de que no tomes en cuenta mis consejos y solo hagas lo que te entra en gana! ¿¡Soy un chiste para ti!?
- ¡Si, si, lo lamento! *jadeo* ¡Volvamos a casa y hablémoslo allí!
- ¡Por supuesto que no! ¡Solo déjame sola! Gra- Grandísima inmadura ¡Nunca me tomas en serio!
- ¡Si lo hago! *suspiro* (Aunque quizá esta vez sí me pasé un poco…) ¡Pero ahora mismo solo piensa quién está siendo inmadura!
- ¿¡Huh!? ¡Oh no! ¡No trates de regañarme con mis propias palabras, César!
- ¡Si no lo hago nunca entenderás!
Esto se estaba volviendo peligroso, bueno, más de lo usual. Pelear con Lucy no era precisamente algo fuera de lo común. Pero esta ocasión era especialmente riesgoso. Los informes que Belle nos compartió apenas unos días antes ya mostraban un incremento extraño en el número de seres etéreos en la zona. El peligro de por si acechaba en todo momento, así que ni hablar en medio de una noche lluviosa… Por no mencionar que con mi pierna aún lejos de estar como nueva, lo más seguro sería que en cualquier momento ya no pudiera caminar más.
- *jadeo* ¡No puedo alcanzarte si sigues corriendo, Lucy! *quejido* A- ¡Aun no estoy recuperada del todo!
- ¡Ja! ¡Esa es justamente la idea! … … So- ¡Solo deja de perseguirme, grandísima idiota! ¡Tienes que descansar!
- ¿¡Qué!? ¡No voy solo a dar la vuelta y dejarte sola a las afueras de esta cavidad!
- ¿¡Acaso soy una niña!? ¡Puedo cuidarme sola!
- ¡Nunca dije que no pudieras! *jadeo* ¡Pero es mi trabajo cuidar de cada uno de los nuestros!
De repente, ella se había detenido al fin. Pensé que había logrado que entrase en razón, pero para mi sorpresa solo regresó a verme con una mirada enfurecida.
- ¿¡Ah si!? ¡Oh mira, es la gran César cuidando de los habitantes de la periferia! – con cada palabra daba un paso más cerca de mí. Su pequeña estatura sin dudad no era un impedimento para imponer respeto -.
- So- Soy la nueva guardia suprema… ¡Es mi trabajo cuidar de to-
- ¿¡Y entonces quién te cuida a ti, tonta!? ¡Haz estado sobre esforzándote en cada trabajo y aunque he dicho que parases no me haces caso!
- Y- Yo… Es mi deber aho-
- ¡Al diablo eso! ¿¡Recuerdas lo que dijo el doctor que te revisó luego del último trabajo!? – la noche era realmente oscura, pero sus ojos llenos de rabia parecían casi brillar en medio de las tinieblas y la tupida lluvia que caía del cielo -. ¡Estuviste a un ataque más de no poder caminar en meses!
- E- Eso solo fue un accidente… ¡Debemos afrontar esos riegos cuando- … …
Entonces escuché algo, fue muy tenue pero lo suficientemente notable como para haber llamado mi atención. No estaba segura de qué lo había provocado o de dónde exactamente había venido. Pero debía estar atenta, quizás podría regresar en cualquier momento.
- ¿Qué? ¿Te quedaste sin palabras?... ¡No dejes un discurso a me-
- ¡Shh! No hagas ruido, Lucy…
- ¿¡Eh!? ¿¡Acabas de interrumpi- ¿¡Hmph!? – sin otra opción, tuve que cubrir su boca con mi mano. Ahora mismo estaba demasiado molesta como para escuchar a su sentido común -.
- ¡Lo digo en serio! Escuché algo…
- …
Un par de segundos pasaron. Creí que quizá había sido solo mi imaginación, pero entonces pude percibirlo de nuevo. Un sonido quebradizo… Como cuando dos trozos de roca se frotan entre sí. A mi mente cansada luego de haber corrido por tanto tiempo, le costó darse cuenta de lo que era en verdad.
- ¡Lucy, debemos irnos de aqu-
Sin darme tiempo a terminar, un gran estruendo resonó por la zona junto a un gran temblor. El risco en el que estábamos paradas se estaba empezando a desmoronar gracias a toda el agua de lluvia que había filtrado en el suelo. Quise reaccionar para tratar de escapar con Lucy, pero para cuando regresé a verla ella ya había empezado a caer por el barranco.
- ¡AH! CE- ¡CÉSAAAAR! – su voz apenas se podía escuchar mientras se iba alejando a gran velocidad -.
- ¡LUCYY! E- ¡ESPERA, AHÍ VOY!
No tenía tiempo para pensar en un mejor plan, por lo que solo salté esperando que con algo de suerte pudiera atraparla antes del impacto. Pero claramente esa no era la mejor idea y en medio de mi caída varios escombros empezaron a descender tras de mi hasta que uno finalmente terminó por golpear mi cabeza.
Mi vista comenzó a tornarse borrosa conforme iba cayendo inconsciente. Lo único que pude recordar antes de finalmente quedar en blanco fueron los gritos de Lucy ya apenas audibles y las frías gotas de lluvia que iban cayendo en mi cuerpo, mezcladas con la árida arena del desierto.
~ Una semana antes ~
- ¡Hay que hacer un brindis por nuestra nueva jefa! ¡POR CÉSAR!
- ¡¡POR CÉSAR!!
- *risita* Oh vamos, me dan demasiado crédito~
El ambiente estaba bastante animado en casa y gracias a que la organización de los últimos encargos terminó siendo un éxito, decidimos hacer una pequeña fiesta para festejarlo. Aunque bueno, al final terminó más bien por ser una ronda de cocteles tras otra gracias a Burnice.
Llegó un punto en el que ya ni siquiera estaba consciente de cuánto había bebido y la verdad tampoco es que me importaba. Necesitaba una buena distracción luego del estrés por trabajo de estos últimos días. Ser jefa suprema sin duda era exhausto y apenas estaba adaptándome a ello. Hubo varias noches en las que no pude ni siquiera dormir, así que ahora mismo esto se sentía sin dudas refrescante.
- ¡Hey, Lucy! Po- ¿¡Por qué no vienes a destejar con nosotros!? *risita*
- *suspiro* Para tu información, al menos sería bueno que alguien de nosotros permanezca sobrio…
- ¿¡Huh!? ¿Y dónde está el chiste en una fiesta así?
- Aghh… ¡Idiota! ¡Eres la nueva jefa! ¿¡Estás consciente de que en cualquier momento alguien podría aprovecharse de un momento así para arrebatarte el puesto!?
- Oh vamos, pi- piensas mucho en los pequeños detalles, Lucy… - aun tambaleándome un poco por las bebidas, decidí acercarme más a ella -.
- ¡Los pequeños detalles lo son todo en este tipo de cosas! *suspiro* Ni siquiera tiene caso tratar de hacerte razonar ahora mismo ¡Estás ebria!
- *risita* Solo bebí un poco en la fiesta~
- Como si no te hubiese estado viendo… ¡Burnice llevó dos jarros más de cóctel solo para ti! *suspiro* A este ritmo tendré que pedirle a Heno, Leño y Teja que te lleven a cama… ¡Porque no pienso cargar con tu cuerpo hasta allí!
- Jeje~ Gra- Gracias por preocuparte tanto por mí, Lucy…
- ¿¡Eh!? *rubor* Po- ¡Por supuesto que no me preocupo por ti! So- ¡Solo hago mi trabajo como asesora!
En medio de nuestra conversación alguien entró a la sala. Llevaba puesto unas gafas oscuras y ropas algo extravagantes para un motociclista; si tan siquiera se trataba de uno. Al vernos, simplemente se acercó a la mesa con una carpeta, dejándola allí sin ninguna explicación.
- Ehh… Para tu información, ahora mismo los Hijos de Calidón están ocupados. Así que no podemos aceptar ningún tipo de propues-
- Es un encargo urgente – acotó en un tono grave, mientras tenía su mirada fija en mí. Usualmente no habría recordado un detalle como ese en el estado que me encontraba, pero en ese momento me pareció de algún modo… Inquietante -. Además, he venido aquí para hablarlo directamente con la jefa…
- ¿¡Huh!? ¡Ok, escúchame! ¡No sé quién te crees que eres, pero ahora mismo ella es-
- Tra- Tranquila, Lucy… Déjame al menos leer lo que dice…
- Ce- César…
Mi mente seguía mareada, pero al menos debía hacer un esfuerzo para tratar de entender qué es lo que buscaba este sujeto.
Al revisar a paso rápido cada hoja pude comprobar que se trataba de un encargo para recuperar algunos cargamentos de una pequeña cavidad no muy lejos de aquí. Sin duda no sonaba urgente como él lo describía, pero lo cierto era que tampoco se veía especialmente complicado. Más bien parecía el tipo de trabajo de siempre antes de que tuviera que asumir mi nuevo rol.
- Hmm… N- No se ve difícil… ¡Está bien! *risita* ¡Me haré cargo de ello!
- *sonrisa* Sabía que podría contar con usted…
- ¿¡Qué!? ¡Oye, no puedes solo tomar decisiones así estando ebria!
- Tranquila Lucy~ No se ve difícil y además… Co- Con todo esto de ser la nueva jefa no he tenido tiempo de poder luchar de nuevo… ¡Esta es una gran oportunidad para hacerlo!
- ¡Aun si es por ello, no lo debes tomar a la ligera! ¡Ni siquiera has estado descansando apropiadamente estos días! *suspiro* ¡Ahora, escúchame tu! ¡Incluso si es urgente debes hacer la petición en un momento más!... Oportuno…
Para cuando alzamos la mirada, aquel hombre ya se había marchado. Ni siquiera sabíamos su nombre, pero con los papeles ahora en la mesa sería imposible echarnos para atrás.
- Esta idea es terrible y lo sabes, César…
- ¡Estaremos bien! Solo será entrar a la cavidad, recuperar ese cargamento y traerlo de regreso… Yendo todos juntos no nos debería tomar más de un par de horas
- *suspiro* Solo espero que tengas razón, idiota… Como esto termine siendo un dolor de cabeza, te juro que yo misma te daré una lección que no podrás olvidar…
- Si si~ ¡Ahora vamos a la fiesta! Podrás no beber si quieres, pero al menos nos harás compañía
- A veces, de verdad no se si soy más bien alguna clase de niñera para ti…
Con un nuevo objetivo en mente, ambas nos marchamos de regreso a la diversión. Las últimas semanas fueron sin duda un suplicio para mí y el ver que ahora tendríamos al menos algo para "cambiar de aire” sin duda se sentía refrescante.